En días pasados hablaba con mi esposa y le pregunté si se consideraba una persona ordinaria, la pregunta la tomó por sorpresa, y realmente se que estuvo mal encausada, pero le creó el impacto que yo quería, inmediatamente me dijo que no, porque era hija de DIOS y por tanto no se consideraba así, a mi me gustó la respuesta, pero después le expliqué lo que buscaba con la pregunta.
Le dije que bienaventurados son todos aquellos que se consideren personas ordinarias, es decir, común y corriente, como tu y como yo, porque son esas las personas que DIOS está buscando para hacer cosas EXTRAORDINARIAS.
Y realmente es lo que JESÚS hizo en su paso por la tierra como hombre, EL no fue a buscar a los escribas, personas que sabían leer y escribir, no fue a buscar a los sacerdotes, quienes se creían saber todo acerca de la palabra de DIOS y por ende ser los elegidos para guiar a su pueblo, no fue a buscar a los reyes, príncipes, ricos, jueces, NO, EL no fue a buscarlos, por el contrario fue a buscar personas sencillas, que desconocían de su palabra y buscaba hacerlos doctos en ella.
"...Venid en pos de mi, y haré que seáis pescadores de hombres...". Marcos 1.22
Estas palabras se las dijo JESÚS a SIMON y ANDRES, dos hermanos pescadores, que se encontraban a la orilla del mar, arreglando sus redes, personas sencillas, desconocedores totalmente de su palabra, quienes sin dudarlo dos veces, siguieron en pos suya, y ya conocemos la historia, fueron designados como apóstoles, y predicadores de su palabra.
Estas son las personas ordinarias que busca JESÚS, aquellas que se encuentren cargadas de problemas, que desconozcan su palabra, que se encuentren necesitados de ella, necesita muchos SIMONES y muchos ANDRES, abiertos a recibir de sus enseñanzas, que abran sus corazones a su presencia, que dejemos morar su espíritu en cada uno de nosotros, esas son las personas que DIOS necesita, EL nos está buscando.
Por eso no dudes cuando DIOS te busque, cuando llegue a tu vida y te diga que quiere hacer cosas maravillosas contigo, que te quiere utilizar para hacer cosas extraordinarias en la vida de otras personas, y no pienses que no estás preparado, que no sabes nada de su palabra, no pienses qué vas a hacer para hablarles a los demás.
Te digo que es lo último por lo cual te tienes que preocupar, porque DIOS te va a preparar, solo te bastará abrir tu boca porque EL pondrá las palabras en ella, y hablará a través tuyo, porque así como utilizó a esos pescadores igual nos quiere utilizar a nosotros, quiere hacernos pescadores de hombres, de hombres necesitados, de hombres que llevan un desierto dentro y requieren de un rocío para calmar su sed, de hombres que se han adentrado dentro de un mar y no lo han podido cruzar, necesitan de esa barca para no dejarse llevar por las aguas.
Esas son las cosas extraordinarias que DIOS quiere hacer con personas ordinarias, pero necesitamos creer en EL y creerle a EL, saber que puede hacer todo en nuestras vidas y en la de nuestros hermanos, necesitamos abrirle nuestros corazones y tener esa fe ciega, esa fe de los pescadores quienes sin pensarlo dos veces le siguieron, así debemos actuar, y no dudes porque consideres no estar preparado, porque DIOS te preparará, abonará en tu vida, te limpiará de todas esas impurezas que no han permitido buscar de EL,y luego te alimentará con su palabra, con sus enseñanzas, te volverá una nueva criatura que goza en su presencia y te dará el valor suficiente para que hables con propiedad de su vida, de sus enseñanzas, de las cosas bellas que ocurren en cada uno de nosotros cuando conocemos de JESÚS, cuando hacemos su voluntad, cuando lo dejamos morar en nuestro corazón.
Esas cosas extraordinarias quiere hacer DIOS en esos pescadores, en nosotros que somos personas ordinarias, porque luego de que las haga con nosotros nos utilizará para hacer cosas EXTRAORDINARIAS en la vida de nuestros hermanos, porque EL nos lo dijo, somos la LUZ DEL MUNDO, y debemos alumbrar esa oscuridad en la cual se encuentra sumida la humanidad.
Por tanto si te dicen que eres ordinario, alégrate, porque eres uno de los escogidos por DIOS para hacer grandes cosas, primero en tu vida, y luego en la vida de quienes te rodean.
DIOS te quiere para grandes cosas, no dudes un instante y acudas a su llamado, nada que provenga de EL puede hacernos daño, por el contrario, quiere que vivamos ese gozo que solamente se obtiene con su presencia.
DÉJATE GUIAR POR SU MANO, ELLA TE LEVANTARA Y TE PONDRÁ EN LO MAS ALTO COMO AL AGUILA.
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