Todos creemos en DIOS, por muy incrédulos que seamos tenemos conciencia de la existencia de un ser superior creador del universo, unos lo llaman DIOS, otros lo llaman evolución, otros lo llaman energía, en fin, estamos como en la antigüedad cuando el hombre creía en la existencia de varios dioces, pero sin importar tu religión, sigo diciendo que es una invención del hombre para subyugar a las personas, tus creencias, sin importar cuáles sean tus convicciones, todos, sin excepción alguna, creemos en algo superior, yo creo en DIOS, y creo en JESÚS como el hijo de DIOS, como el DIOS mismo, como aquel que llegó a cambiar la historia de la humanidad.
Pero a pesar de ello, de creer en DIOS, de creerle a EL, en ocasiones ponemos en tela de juicio su poder, en ocasiones no creemos que realmente pueda hacer algo por nosotros, un amigo muy especial, al escucharme me regaló un pasaje en donde está la presencia poderosa de nuestro señor, enseñada por nuestro padre JESÚS, y es para que nunca dudemos de lo que puede hacer por nosotros.
"...Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este monte; quítate y échate en el mar, y no dudaré en su corazón, sino, creyere que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho..." Marcos 11.23
Amigos, hermanos, quiero compartir esta palabra con ustedes porque realmente es lo que necesitamos para que nunca más, a partir de hoy, volvamos a cuestionar la obra que DIOS hace en nuestras vidas, a decirle por qué nos ocurren las cosas, a dudar de que efectivamente está a nuestro lado, cuidando de nosotros y fortaleciéndonos.
JESÚS nos dice que basta con que nosotros declaremos con nuestra palabra para que las cosas por más imposibles que parezcan, se realicen, para que así como Moisés abrió su boca para abrir el mar rojo, hacer brotar agua de una roca, cayera maná del cielo, así nosotros podemos derribar un montaña si es necesario.
Nos dice JESÚS que a más de abrir nuestra boca debemos creer en nuestro corazón, es la fe de la que nos habla, hay un aforismo que dice, la fe mueve montañas, de esas montañas nos habla JESÚS, de tus problemas, sin importar cuáles sean, nos dice que seremos capaces de derribarlos, de echarlos al mar, solo basta creer, pero qué, creer que DIOS puede obrar en nuestra vidas, que EL obra todos los días en nuestras vidas, que EL es capaz de hacer por nosotros lo imposible, de abrirnos ese mar que necesitamos para cruzar a la otra orilla, esa orilla en donde nos ha prometido paz, amor, tranquilidad.
Nos dice JESÚS que no dudemos, que creamos en DIOS firmemente, pero como somos humanos, dudamos, no tenemos esa fortaleza de JESÚS quien venció la tentación cuando fueron puestos a sus pies todos los reinos de la tierra y no cedió a ello, entonces como nosotros si dudamos, nos dice que a pesar de ello creamos, continuemos firmes, creamos que DIOS es más grande que nuestros problemas, y con su ayuda los sacaremos adelante, nos sobrepondremos ante ellos, y recibiremos ese mana todos los días de nuestras vidas.
Pero necesitamos abrir nuestros corazones, entregarlos a DIOS, a JESÚS, dejar que entré y more en nosotros, para que podamos gozarnos de su poder, de su gloria, de sus bendiciones, por tanto queridos amigos, hermanos, los invito a que no dudemos del poder de DIOS, que no desfallezcamos, son grandes los problemas que podemos tener, pero recuerda, ES MAS GRANDE NUESTRO DIOS y EL nos sacará adelante frente a esos problemas.
BASTA CREER, DECLARARLO CON NUESTRA BOCA Y DEJAR QUE DIOS OBRE EN NUESTRAS VIDAS, PORQUE SIN EL, NADA SOMOS, YO ANDUVE SIN EL Y NO CONSEGUÍ NADA, HOY TENGO ESA PAZ TAN ANHELADA, ESA VIDA ETERNA LA ESTOY GOZANDO CON SU PRESENCIA, NO CAMBIO MI TRANQUILIDAD POR NADA EN EL MUNDO, Y QUIERO QUE TU TAMBIÉN GOCES DE ELLA.
LOS AMO EN EL AMOR DE CRISTO.
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