El hombre siempre ha propendido por deshonrar a DIOS y quitarle toda la gloria frente a la creación, a través de los tiempos ha querido demostrar que el hombre se debe al hombre y no a un ser supremo que rige nuestras vidas, DIOS, denotando así una soberbia en sus actos y manera de pensar; ha buscado un sinnúmero de teorías, creencias acerca del origen del hombre, los animales, las plantas, la tierra y el propio universo, indicando que todo se debe a una evolución y no como producto de un creador.
Ahora último, un científico de Inglaterra de apellido HAWKING, sostiene que el universo no fue obra de Dios sino de la evolución producto de la explosión del universo, la cual generó la vida en la tierra.
Creo que los propios científicos son conocedores plenos de la palabra de Dios, porque lo que han manifestado en sus teorías no es otra cosa que apropiarse de la obra creadora de Dios, conllevando a sembrar desazón y desconcierto en un gran número de personas que se encuentran deambulando por la vida sin un norte y que no han acogido a Dios en sus corazones.
En el Libro de Génesis Dios nos habla cómo creo el universo, el sol, la luna, las estrellas y cómo surgió la vida en la tierra, creando primero las plantas y los animales, es decir, creando las condiciones necesarias para la aparición de su obra de arte, el hombre, para ello se toma su tiempo en señalar cuál fue su labor en cada uno de los seis (6) días referidos como el lapso adoptado en la creación; en el entendido que en cada uno de esos días se tomó miles e incluso millones de años para culminar su obra.
Retomemos algunos apartes del Capítulo 1 del libro de Génesis, para soportar lo que hemos venido diciendo:
“1-2 En el principio creó Dios el cielo y la tierra y la tierra estaba desordenada y vacía y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas”.
Cualquier parecido con lo señalado por el científico no es pura coincidencia, en su palabra Dios nos indica cómo primero crea el universo y luego da paso a la tierra, para que ello ocurriera tuvo que transcurrir un número considerable de años, porque precisamente se estaban creando las condiciones necesarias en el Universo para dar paso a la tierra, entonces querer demostrar que el universo es producto de una explosión, es hilar muy delgado y no darle la honra a DIOS, es querer anteponernos por encima de su obra.
Igualmente en otros apartes nos refiere como fue creando una a una los elementos necesarios para dar paso a la vida.
3. Y dijo Dios: Sea la luz, y fue la luz… 6. Y luego dijo Dios: Haya Expansión en medio de las aguas…7. E hizo Dios la expansión…8. Y llamó Dios a la expansión Cielos…11. Después dijo Dios: Produzca la tierra hierba verde, hierba que dé semilla, árbol de fruto que dé fruto según su género, que su semilla esté en él sobre la tierra y fue así…14. Dijo luego Dios: Haya lumbreras en la expansión de los cielos…20. Dijo Dios: Produzcan las aguas seres vivientes y aves que vuelen sobre la tierra…24. Luego dijo Dios: Produzca la tierra seres vivientes…”.
Miremos como DIOS luego de crear el universo y la tierra, va desarrollando las condiciones de una manera ordenada, las cuales van encaminadas a crear la vida, es decir, Dios no da paso primero a los animales, las plantas, para luego crear el sol y la luna, el cielo con sus estrellas y planetas, y el agua volverla dulce para el consumo humano, NO, DIOS crea primero las condiciones necesarias para que surja la vida en la tierra, las va ideando una a una de manera consecuente, denotando con ello un proceso evolutivo, una convergencia de las condiciones necesarias para que la vida germinara y tuviera simiente, no lo dejó al azar, todo fue debidamente organizado y calculado, encaminado a la creación del hombre, porque era conocedor de las necesidades de su hijo, de la necesidad de las plantas para su oxigenación, del agua para calmar su sed, de los animales para su alimento y ropaje, entonces me pregunto, cómo llamamos a este proceso que tuvo DIOS en el origen de todas las cosas; será que es necesario que un científico llámese DARWIN, HAWKING y demás, nos vengan a indicar que todo se debe a una evolución y no a la obra creadora de DIOS; cuando la propia Sagrada Escritura nos indica cómo fue el procedimiento adoptado por Nuestro Creador en su obra maravillosa.
Cierto que no hermanos, que no necesitamos de ser un científico para entender nuestro origen, que solamente necesitamos aceptar a DIOS en nuestro corazón, creer en él y creerle a él, ser realmente sus hijos de Dios, tener esa potestad de hijos de Dios, sentirnos como tal, entregar nuestro corazón sincero a las obras de Dios, para que EL a través de su palabra nos indique el camino verdadero, nos denote realmente que todo se debe a su obra y que es nuestro alfarero, que nos toma como si fuéramos arcilla para moldearnos conforme a su voluntad y hacer de nuestras vidas un estilo de vida diferente, de una vida mejor, de una vida en donde todo lo podemos en EL, porque es nuestra fortaleza y ante el cual acudimos en todo momento y lugar, y no solamente cuando nos encontramos afligidos.
Entonces no nos dejemos confundir, no dejemos que se cree esa incertidumbre por parte del hombre, porque todas esas teorías son emitidas por personas que no han acogido a DIOS como su padre, y por el contrario andan buscando adeptos, personas que divagan, personas carentes de fe o que han decaído en la fe, para crear controversia y cizaña en nuestros corazones, pero es allí en donde debemos estar fortalecidos en nuestra fe ciega en DIOS, armados de su palabra para echar por el suelo todas y cada una de las teorías que nos quieren inculcar y que a diario las vemos en todos los medios.
Recordemos que DIOS es uno solo y de EL venimos, no dejes que se cree incertidumbre en nuestros corazones, recordemos que la verdad está en su palabra, y no en la palabra del hombre que quiere parecerse a DIOS, por el contrario, denotemos ante NUESTRO SEÑOR una total mansedumbre y acatemos su voluntad, la cual va encaminada a ser de nosotros unas mejores personas que solo buscan hacer el bien conforme JESUS lo hizo cuando estuvo en la tierra, pues en todo momento aceptó la voluntad de su padre a pesar de saber lo que le deparaba, y en lugar de renunciar a ella, se sometió a lo que quería el padre y actuó de manera sumisa y con un amor verdadero por el hombre.
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