CONTINUACION SALMO DOS

"...El que mora en los cielos se reirá, el señor se burlará de ellos en su furor, y los turbará con su ira. Pero yo he puesto mi rey sobre Sión, mi santo monte. Yo publicaré el decreto, JEHOVA me ha dicho, mi hijo esres tú, yo te engendré hoy. Pídeme y te daré por herencia las naciones, y como posesión tuya los confines de la tierra..."

Dios se antepone a todo aquello que quiera entorpecer su obra en cada uno de nosotros, no significa ello que va a causarle daño a alquien, porque no es un DIOS castigador, sino que al como puso a su hijo JESUS - su rey - sobre su monte de Sión - su pueblo de Israel - de igual forma nos pondrá a cada uno de nosotros sobre su monte, nos tendrá como su pueblo elegido, y para ello se antepondrá a todas las cosas que nos lo vayan a impedir.

Nos ha dicho que hijos somos de EL, y nos ha engendrado en el día de hoy, ese hoy que ocurre cuando volvemos nuestros corazones a su camino, cuando accogemos a JESUS en nuestras vidas, por eso nos engendra a diario, pues cada día somos muchos los que nacemos nuevamente en CRISTO, dejando una vida atrás y eligiendo un nuevo estilo de vida.

DIOS nos tiene por hijos suyos, pero necesita de que nosotros le aceptemos en nuestros corazones, de volver a su vida espiritual con EL, y como un padre le da a sus hijos y colma sus deseos; igualmente nos manda a que le pidamos en oración, que le clamemos y nos dará los pueblos, las naciones, es decir, nos pondrá por encima de nuestras dificultades, de nuestros problemas, de nuestros pecados, nos sacará victoriosos de ello.

Entonces DIOS nos da esa promesa de que a través de su gracia y su misericordia dominaremos por encima de esas aflicciones que en nuestras fuerzas no pudimos derrotar, pero que asidos de su mano nos conducirá por ese valle de muerte para llevarnos a la luz, ese pan de vida que solamente obtendremos si hacemos un alto en el camino y damos un giro la vida que hemos llevado.

DIOS nos tiene grandes cosas, son grandes las maravillas que podemos alcanzar de su mano, no nos dejemos llevar por nuestros probblemas y por el contrario entreguémoslos a EL para que nos ayude a reinar por encima de ellos, y nos daremos cuenta que no existe un problema que con la ayuda de DIOS no podamos resolver.